martes, 23 de octubre de 2007

Imagine

Me levanté esta mañana pensando en si Madrid sería suficientemente grande para ti. Ya sabes, por tu ansia de conocer gente y esas cosas; sobre todo de interactuar con las personas. No me quiero poner sarcástica, pero no sería difícil hacerlo contigo, al fin y al cabo estaría utilizando tus mismas armas.
Por si no lo sabías ya, sí que me importa lo que haces o lo que dejas de hacer. Si llueve pienso en si estarás en casa sentado en el sofá viendo una buena película, y si hace sol te imagino paseando por el Retiro; el problema de todo esto no es mi cabeza pensando en tí, si no la acompañante que creo que siempre está presente.
Aunque desearía ser yo, no creas que no me planteo lo irritante que podría llegar a ser convivir contigo a diario; soportar tu manía de acaparar la cama entera y acorralarme a mi contra la pared, aguantarte siempre en ese horrible chándal por casa, siempre enganchado a tu ordenador como buen infórmatico que eres... cosas que me sacarían de quicio, no lo dudes. Después de pensar en todo esto, también me vienen a la cabeza esos otros momentos, los maravillosos; que me insistas para que siga durmiendo contigo y no me levante todavía, ver lo guapo que estás en cuanto te quitas el maldito chándal, cuando me enseñas con cariño a hacer más cosas con el ordenador... sí, tonterías, pero que me gusta disfrutar a tu lado.
Como la moda sabes que me encanta, te llevaría de compras conmigo para que me aconsejes. Te conozco, y si tienes el día "tonto" acabaremos en La Perla, probándome ropa interior y tú disfrutando con ello. Si tienes el día romántico, me llevarás a Hermès y me regalarás mi ansiado Birkin rojo. Y si estás enfadado... me llevarás a Loboutin a que me compre los tacones más imposibles y más altos que encuentre, para tenerme controlada sabiendo que muy lejos no podré ir.
Yo iré de mientras a la tienda de mascotas más cercana, a comprar un collar de castigo y una correa bien corta, para que no escapes de mi lado nunca. Te compraré un bozal, para los días en que hables demasiado. Y un almohadón-camita, para que cuando la que acapare la cama sea yo puedas irte a dormir a algún lado.

4 comentarios:

Nosotras mismas dijo...

Pasaba a saludar.

Besos.

Alma DeLuXe dijo...

A mi también el que me trae de cabeza es un informático...jeje...por qué no te das la oportunidad de realizar todo eso? si no hay manera...no te martirices en demasía, no más de lo indispensable. Muchos besos.

unrinconcitoenelmundo dijo...

Deja de imaginar y haz tus sueños realidad, o por lo menos inténtalo. Gracias por agregarme a tu blog!!!
Besis!

Bimba dijo...

INCREIBLEEEEEEEEEEEE